Historia de pueblo magico Cadereyta de Montes
La importancia política, histórica y cultural de Cadereyta quedó de manifiesto al crearse el Estado de Querétaro en 1824 y el Partido de Cadereyta fue agregado al nuevo Estado de la federación mexicana, quedando como un Distrito Político. Como Partido, Cadereyta aportó más de la mitad del territorio estatal que actualmente tienen los Municipios de Cadereyta de Montes, San Joaquín, Ezequiel Montes, Peñamiller, Pinal de Amoles, Jalpan, Arroyo Seco y Landa de Matamoros, así como el actual Municipio de Pacula en el Estado de Hidalgo. Con esta división territorial y política de 1824, el Distrito de Cadereyta quedó integrado únicamente por la cabecera y las poblaciones de El Doctor, Bernal y Vizarrón, entre otras de menor importancia.
En el año 1861 la Villa de Cadereyta fue declarada ciudad, y hacia 1873 el Distrito y Prefectura de Cadereyta se reorganizó para quedar dividido en cuatro Ayuntamientos: la Cabecera, Vizarrón, El Doctor y Bernal. Estos tres últimos con la categoría de Sub-prefecturas hasta el año 1915, cuando Venustiano Carranza, Jefe del Ejército Constitucionalista Revolucionario, decretó la supresión de los Distritos e instituyó el sistema de Municipio Libre para todo el país.
El 11 de mayo de 1904 se agregó al nombre de Cadereyta el apellido “?de Montes” en memoria del ilustre Lic. Ezequiel Montes, originario de este lugar, quedando con este nombre la ciudad y Distrito de Cadereyta de Montes.
Turismo en Cadereyta de Montes pueblo magico
Cadereyta posee diversos atractivos naturales, dignos de ser visitados por turistas nacionales y extranjeros. Se cuenta con una zona boscosa en La Mora, La Esperanza y El Doctor, ideal para el campismo. En esta misma región existe una zona arqueológica conocida como Toluquilla.
En los límites con el Estado de Hidalgo, la comunidad de Taxhidó posee un manantial de aguas termales en forma de balneario natural en medio de un paisaje impresionante, pues se encuentra enclavado en un pequeño cañón. A un costado pasa el río Moctezuma-Pánuco que, al unirse con el Extoraz, permite practicar la pesca deportiva.
De los poblados típicos, los más característicos son Vizarrón, por su actividad artesanal en mármol y La Nopalera, donde se pueden observar algunas pinturas prehispánicas en un abrigo rocoso.
También la presa de la central hidroeléctrica Zimapán es un atractivo turístico de importancia en el municipio, pues ahí se practica el paseo en lancha para admirar los paisajes que parten de la Sierra Gorda.
En la Cabecera Municipal se puede visitar, además del “Pilancón” ubicado en el parque Las Fuentes, la iglesia parroquial de San Pedro y San Pablo, edificación que iniciaron los Franciscanos en 1725 y donde se aprecia un magnífico retablo barroco churrigueresco a base de columnas estipules en sus tres cuerpos y su fachada Neoclásica. Construida a principios del siglo XIX, destacan sus torres de cantera roja y oscura.
- Artesanía
En la localidad de Vizarrón procesa el mármol en: lapidaria, mosaicos, artículos decorativos, mesas, tableros para ajedrez, ceniceros, portaplumas, alhajeros y juegos de baño, entre otros.
En algunas comunidades se utiliza la vara para confeccionar artículos decorativos: canastas, sombreros, abanicos y lámparas. Además, se fabrican artículos de barro tales como: ollas, cazuelas, comales, jarros, macetas, ceniceros y jardineras, que son comercializados en los estados vecinos. - Gastronomía
Como algo muy típico de este municipio se prepara la singular, suculenta y popular barbacoa de carnero, con su insuperable consomé y sin que falte el “montalayo”. También se disfruta una gran variedad de guisos con nopales y el especial guisado de xoconoshtle.
El dulce de biznaga es el más típico del municipio aunque también se elaboran dulces de calabaza, membrillo, manzana y guayaba, de preparación casera; al igual que las conocidas campechanas y la deliciosa fruta horneada con leña en hornos caseros, construidos con ladrillo y solera.
Dentro de las bebidas sobresalen el pulque y el agua de frutas.