Historia de pueblo magico Tula
Fray Juan Bautista de Moliendo era natural de Postugalete, Vizcaya, cerca de Bilbao, España, Vino a la Nueva España y tomó el hábito franciscano en el convento de Acámbaro, Guanajuato, donde estudió la lengua otomí con la idea de evangelizar a los indios. En 1607, junto con Fray Juan de Cárdenas, descalzos y llevando por equipaje un poco de maíz tostado llegaron a Santa Catarina, luego a Pinihuan donde el Padre de Mollinedo, celebró una misa, de allí pasaron a Lagunillas y después al valle del Maíz, todos estos lugares pertenecientes al actual estado de San Luis Potosí, para finalmente levantar la iglesia en Tula. En todos estos lugares predicó, catequizó y prometió enviar ministros para que instruyeran a los indios (mascorros, pames, cuachichiles, pizones, cisanes, coyotes, etc) y fundaran iglesias. A su regreso a la falta de permiso del Rey Felipe III para la evangelización de estos lugares. El 5 de marzo de 1612 se autorizaba al marqués de Guadalcazar para realizar la conversión de los indígenas de Río Verde, Cerro Gordo y Jaumave. Al pedir informes el Virrey a Mollinedo de su viaje en 1607, éste manifiesta que se le había recibido con gran amor por los indios y que fueron bautizados algunos pequeños y casadas ocho parejas de grandes, por lo que se le concedió a esos lugares con su compañero Juan de Cárdenas. Los trámites se llevaron cerca de diez años, ya que fue hasta el 1º de julio de 1617, con la misma formalidad y circunstancias que en los lugares anteriores, tomó posesión de San Antonio de Tula, en donde dejó a Fray Diego de Espinoza como encargado de la conversión de los naturales.
Tiempo después, Tula pasó a pertenecer en lo político y militar a la justicia de Valles
En 1703 su población estaba formada por españoles, mestizos, mulatos e indios lobos, coyotes, pames y pizones, entre otros, su capitán vivía frente a la actual parroquia en una casa de adobe con sus corrales y aposentos para 16 soldados.
Cuando José de Escandón llegó a Tula con el título de lugarteniente de Virrey en la costa del Seno Mexicano, para su conquista, pacificación y colonización, tenía una población numerosa, formada en dos terceras partes por indígenas y mestizos y la otra por españoles. Fue entonces cuando se hizo el trazo de la población.
Al enterarse los habitantes de Tula de lo ocurrido en Dolores el 15 de septiembre de 1810, se organizó una conspiración al mando de Mateo Acuña y con la participación de Reyas Pérez, jefes de los indígenas de la misión de Tula. Hubo el primer levantamiento armado el 4 de diciembre, cuando Bernando López de Lara penetró al cuartel de los dragones y tomó las armas para los insurgentes. Después de cruentas luchas, los realistas tomaron prisioneros a Mateo Acuña y lo ahorcaron en esta población; pero Bernardo Gómez, el “indio huacal”, reunió un nuevo ejército y el 9 de junio de 1811 se presentó en Matehuala, San Luis Potosí, en donde tomó la plaza, que era defendida por el teniente José Velázquez.
Por decreto del 17 de octubre de 1835 se le concedió a Tula el título de Ciudad que para 1843 contaba con una población de 9,387 habitantes; en 1873 ascendió a 16 000. Sus habitantes se dedicaban al comercio, ya que era el centro de las comunicaciones entre los puertos del Golfo y la frontera. Asimismo, se dedicaban al cultivo y beneficio de la lechuguilla, ocupando diariamente a más de dos mil trabajadores, cuando fue creado el cuarto distrito de Tamaulipas, se le concedió título de cabecera pero el 25 de marzo de 1866, durante la ocupación de la plaza por las fuerzas del coronel francés Charles Dupin, dicho distrito fue suprimido.
Turismo en Tula pueblo magico
Durante la época colonial fue construida en la villa de San Antonio de Tula una pileta en donde se recolectaba el agua, se empedró la zona circundante al manantial, llamado Paso de la Purísima por tener plantada la virgen en una de sus retenes.
Otro de los edificios históricos de Tula es la Capilla de la Loma del panteón viejo a un lado del barrio éste lugar sirvió como estrategia militar durante los enfrentamientos revolucionarios, ahí mismo sepultaron algunos de los caídos.
Sin duda que el edificio más atractivo de Tula es la Casa Minerva construida durante la última década del siglo XIX el edificio pasó a manos del gobierno estatal debido a los problemas fiscales que tuvo el dueño, se convirtió en la escuela número 2 de la localidad.
Hoy en día es la Casa de la Cultura se sitúa en la calle Hidalgo, recargada su planta en una ladera y ostenta una larga hilera de puertas cuyos jambos ojivoles le dan un toque gótico.
Otra muestra más de la arquitectura tolteca es la Capilla del Rosario construida durante el porfiriato, cuenta con una cúpula dorada, acabados de filigrana y pisos de madera pulida, la Capilla construida por la Hermandad del Rosario fue inaugurada en 1905.
Templo del Rosario, construido por las hermanas del Rosario, inaugurado a fines del presente siglo; Templo de las Agustinas, edificio Minerva, construido durante la última década del siglo XIX, fue hasta 1922 escuela secundaria y posteriormente escuela Minerva. Hoy en día, es la Casa de la Cultura, Templo de San Antonio de Padúa, aquí se alberga un reloj considerado como un símbolo de los tultecos, ya que por medio de un patronato y con el apoyo de la Sra. María Fabiana Sebastiana Cármen Romero Rubio, quien naciera en esta ciudad y fuera esposa de don Porfirio Díaz se logró su adquisición, construcción del siglo XVIII; Exhacienda Cerro Gordo y Exhacienda de la Verdolaga.
Monumento a Juan B. Mollinedo, situado en el parque infantil Bertha del Avellano; a Alberto Carrera Torres, ubicado al inicio de la avenida del mismo nombre; a Manuel Villasana Ortíz, en la escuela primaria Miguel Hidalgo; a Benito Juárez, se localiza frente a la escuela del mismo nombre; y a Francisco I. Madero.
En el ejido La Laguna se cuenta con la pirámide de Tamajul, misma que está en la etapa de estudio y pronto estará abierta al público; potrero de La Palma, el Coronel y las Pintas existen restos arqueológicos.
- Artesanía
Cestería, alfarería, bordados, manualidades, coronas, talabartería, curtiduría, se elaboran sillas de montar y diversos trabajos en palma y lechuguilla. - Gastronomía
Las enchiladas tultecas, únicas en el estado, preparadas con tortillas coloradas, queso, chorizo, lechuga, cebolla, tomate, chícharos, chile píquin, en vinagre y una pieza de pollo; el pipián de semilla de calabaza molida, con chile color, nopalitos, chochas, gordas de horno, arepitas y tamales. Queso de almendras, chilacayote, ponteduro, calabaza y camote. Champurrado, atole de maíz y de teja.