En 1937 el investigador Alberto Escalona Ramos nombró a esta zona arqueológica como Oxtankah. Además esta palabra puede tener tres interpretaciones: “en medio de tres pueblos”, “tres barrios” o “lugar rodeado de ramones”. Se encuentra a 16 kilómetros al norte de la capital del Estado de Quintana Roo, México.
Es la ciudad prehispánica más grande e importante que se ha descubierto en la bahía de Chetumal. La máxima prosperidad de su sistema socio-político, se alcanzó durante el Clásico temprano; cuando los grupos dirigentes de Oxtankah fungieron como rectores de las poblaciones aledañas, reflejando su poder aún en la arquitectura. Además en esa época varios edificios se ampliaron notoriamente duplicando sus proporciones originales; la extensión de la ciudad rebasó los límites de la costa incorporando a la isla Tamalcab.
El área nuclear del asentamiento comprendía por lo menos diez plazas y dos patios hundidos delimitados por edificios, más de treinta estructuras aisladas y un cenote. Así el diseño arquitectónico dominante de las estructuras es del estilo Petén: cuerpos superpuestos con muros en talud, con esquinas redondeadas y remetidas, cuyo elemento esencial es la moldura llamada “en delantal”. Para abastecerse de agua dulce, construyeron pozos y chultunes, donde captaron agua de lluvia.
La navegación fue una actividad común, por lo que en canoas recorrieron los canales de la región y cruzaron la bahía de Chetumal para transitar el mar Caribe de norte a sur, relacionándose con otras poblaciones costeras y participando en los sistemas de intercambio a larga distancia, para obtener productos marinos y terrestres foráneos que distribuían a otras comunidades asentadas tierra adentro. A la entrada de los españoles, Oxtankah tenía unos 400 años abandonada.
Horario de acceso a Zona Arqueológica Oxtankah es de Lunes a Domingo de 08:00 a 17:00 horas con un costo de $55.00 MXN.